Las hembras de ciertos primates abortan ante la llegada de un nuevo macho

Todos los animales pueden sufrir abortos naturales, pero no se sabe si el ser humano es el único que puede inducir abortos de manera voluntaria. En los años 50 se descubrió que las ratas preñadas que eran expuestas a algún macho que no fuera el padre sufrían abortos espontáneos. Se bautizó este fenómeno como Efecto Bruce (en honor a su descubridora, la zoóloga Hilda Bruce). Lo más curioso es que los machos castrados no producían estos abortos, por lo que se terminó concluyendo que el origen de este fenómeno era hormonal, asociado a las feronomas que producen los machos y que el órgano vomeronasal de la hembra es capaz de detectar.

Es bastante evidente la utilidad de estos abortos para ambos sexos: el macho consigue que una hembra «no disponible para la reproducción» pase a estarlo mucho más deprisa. Igualmente, la hembra no gasta tiempo y recursos en unas crías que muy posiblemente iban a quedar desatendidas o que podrían morir a manos del nuevo macho.

Efecto Bruce (la representación puede no ser fiel a la realidad)

El Efecto Bruce ha sido estudiado en muchos otros roedores, pero se ignoraba si otros animales sufrían este tipo de abortos, situados en una delgada línea entre el aborto espontáneo (realmente la hembra no decide abortar) e inducido (un factor externo fuerza el aborto). Existe un estudio sobre yeguas que abortan si no pueden ocultar la paternidad de un potro de padre ajeno a la manada, pero poco más.

Al menos hasta ahora, ya que investigadores norteamericanos han concluido, tal y como se publica hoy en Science, que las hembras de Geladas (un cercopitécido muy similar a un babuino) ponen fin a sus embarazos cuando un nuevo macho obtiene el control del grupo. En los grupos de Geladas sólo existe un macho dominante, y cuando este es sustituido por otro, el nuevo suele matar a toda la descendencia del macho anterior. De esta forma, el aborto permite a las hembras ahorrar las energías que emplearían en parir a una cría que sería considerada una paria por el nuevo jefe, y muy probablemente terminaría muerta.

Hembra de Gelada (Fuente: Wikipedia)

El ensayo fue llevado a cabo en el Parque Nacional de Simen, en Etiopía, a partir de datos demográficos examinando los patrones de nacimientos durante la ascensión de los nuevos machos. También se tomaron datos hormonales a partir de las heces de las hembras, para determinar cuáles estaban preñadas y desde cuándo. Las conclusiones fueron que el 80% de las hembras de Gelada abortaban en las semanas posteriores a la llegada del nuevo macho, debido a los beneficios de fitness que esto conlleva.

A la espera de nuevos descubrimientos, la pregunta más interesante es: si el efecto Bruce existe en primates… ¿Podría existir algo semejante en humanos?

Fuente: Science

8 Respuestas a “Las hembras de ciertos primates abortan ante la llegada de un nuevo macho

  1. Pingback:Las hembras de ciertos primates abortan ante la llegada de un nuevo macho

  2. Pingback:Enlaces yuriesféricos del 23/02/2012 | La Yuriesfera

  3. Rubén 25/02/2012 en 2:16 pm

    La concepción de los seres vivos como seres sometido a unos mecanismos ciegos de adaptación, basados en ecuaciones de coste/beneficio, es una simplificación ridícula de las teorías darwinistas. Este tipo de interpretación neodarwinista, no tiene nada de neutral y cobra sentido a partir del inicio del capitalismo y las políticas coloniales de finales del siglo XIX.
    El comportamiento de los organismos, incluídos los seres humanos, responde a múltiples factores que habría que analizar en cada caso y que difícilmente puede explicarse a través de mecanismos como el descrito por el efecto Bruce. ¿Qué diferencia existe entre este tipo de visión de las leyes adaptativas y los plantemientos creacionistas? Desde mi punto de vista ambas visiones son dogmáticas, simplistas y reducen a los organismos a meros autómatas guiados por mecanismos adaptativos, genes o diseñadores inteligentes.

    • ceprio 25/02/2012 en 2:25 pm

      En mi opinión ni una cosa ni la otra. No somos zombies autómatas, de hecho el ser humano tiene una capacidad de decisión que en última instancia le permite actuar de forma distinta a como quizá nos parecería lo «natural». Por ejemplo la mayoría de gente que tiene un hijo con Síndrome de Down no lo tira por el balcón xD

      Pero no podemos negar de donde venimos, y nuestros genes juegan un papel importante, por suerte para nosotros, aunque eso no implique ni mucho menos que seamos autómatas. Pero en muchas cosas lo somos: nos entra hambre y sentimos excitación sexual, por ejemplo. Ahí sí que no podemos negar nuestros genes y nuestra naturaleza.

    • ernie 25/02/2012 en 2:42 pm

      ¿Alguna idea alternativa? ¿Alguna propuesta que explique mejor este fenómeno? =)

  4. Pingback:Las hembras de ciertos primates abortan ante la llegada de un nuevo macho | Cuéntamelo España

  5. LUNA 26/02/2012 en 12:00 am

    Falta saber ¿CÓMO producen ese autoaborto?

  6. Pingback:Tienes derecho a no tener libertad | Diana Acosta Padrón

Deja un comentario